Vampiro 3: Un angel caido

Un ángel caído


La enfermera salio de nuevo al pasillo, esta vez llevaba un teléfono celular consigo, al parecer hablaba con alguien importante

-¿hola? ¿Es usted la tutora de Angela?-


¿Quién? La tutora de Angela, eso era algo que no esperaba, acaso estaba tan mal como para llamar a su tutora, dios ¿Qué le abra pasado?


-descuide, ella esta bien, pero no creo que debería regresar sola a casa, vera ella se desmayo a la hora de la salida, pero parece que ya esta mejor-


Yo solo podía mirar a la enfermera, saber que Angela ya estaba despierta me hacia sentir mas relajado.

-claro, la esperare aquí-

Colgó el teléfono celular, me dio una media sonrisa y entro de nuevo en la habitación, yo solo esperaba que Angela saliera pronto, quería verla, quería saber de primera mano que ella estaba bien, la puerta se abrió de nuevo, me levante enseguida y vi salir a la enfermera, rayos, yo esperaba ver a Angela, se acerco a mi y me entrego un pedazo de papel, se dio la vuelta y entro de nuevo en la habitación, desdoble la nota y lei lo que estaba escrito


Lamento lo ocurrido, no era mi intención.

Pero te pido de la mejor manera que te vallas

Te veré mañana

Atte. Angela


Eso era algo que no me esperaba, sentí una punzada de dolor en mi pecho, eso enserio me dolió, pero por otro lado era completamente comprensible, su tutora vendría por ella seguro que no me querría ahí para presentarme en ese momento, aun así sentí un dolor en mi corazón, doble de nuevo la nota y la guarde en mi bolsillo, tome mi mochila del suelo y comencé a caminar a la salida, estaba por dar vuelta en un pasillo cuando la vi, era un ángel caído, ya la había visto antes, mucho antes y no habíamos tenido la mejor relación del mundo, ¿Qué estaba haciendo aquí? Sea lo que sea yo no quería averiguarlo, retrocedí por el pasillo hasta que llegue a una puerta, entre en la habitación y cerré tras de mi, me agache detrás de la puerta y me quede ahí unos minutos, solo para estar completamente seguro de que ya no estaría en el pasillo cuando yo saliera de ahí, hacia tanto tiempo que no veía a Alice, aun podía recordar cuando la conocí, cuando era un ángel, cuando intento ayudarme, cuando por mi culpa se quedo en este lugar, cuando la perdí a ella, hace tanto tiempo que me había olvidado de ella, me dolía recordarla, sacudí mi cabeza, intentando sacármela de los pensamientos, unos minutos después lo logre, aunque no por completo, me asome por la puerta para cerciorarme de que no había nadie en el pasillo, mire a ambos lados y no vi nada ni a nadie, Sali de la habitación en la que me había metido y corrí a la salida, una vez fuera de la escuela me interne en el bosque, corrí por el hasta que literalmente me canse, me senté cerca de un árbol y me recargue en el mismo, ¿Qué debo hacer ahora? Estaba confundido y angustiado, entonces supe lo que debía hacer, debía buscar a Angela, quería hablar con ella, necesitaba hablar con ella, pero ¿Dónde iba a encontrarla? Recordé la vez que la había visto en el bosque, seguramente no debería vivir lejos de ese lugar, me levante de donde estaba y de nuevo corrí por el bosque.


Pronto llegue al lugar en donde la había visto aquella vez, comencé a caminar alrededor, en busca de alguna señal de ella, algo que me indicara hacia donde ir, vague por el bosque durante horas, la noche ya se había hecho presente en el lugar, estaba a punto de darme por vencido cundo pude ver una casa, me acerque a ella y de pronto una de las ventanas se encendió, me escondí detrás de unos arbustos y luego la vi, era Angela, estaba sentada junto a la ventana, mirando hacia la nada, comencé a salir de los arbustos y enseguida puso sus ojos en mi, abrió la ventana se asomo por ella, parecía sorprendida de verme


-hola Angela-

-¿Qué estas haciendo aquí?-

-a mi tanbien me da gusto verte-

-lo siento, no era mi intención reaccionar así-

-descuida, ¿Cómo estas?-

-bien, gracias por lo de hace rato-

-no tienes que agradecerlo-

-es tarde, ¿Qué quieres?-

-no podía esperar hasta mañana-

Ella se quedo pensativa por un rato, como si no supiera de que estaba hablando, después su cara dio paso al recuerdo, ¿Cómo se había olvidado de la nota?


-lamento eso-

-no tienes por que disculparte tan solo quiero hablar-

-¿ahora?-

-si tienes tiempo-


Su cara parecía pensativa, indecisa, como si quisiera hacerlo pero al mismo tiempo no, yo esperaba que dijera que si, yo necesitaba hablar con ella, sobre muchas cosas, aun no decidía muy bien que contarle y que no pero eso podría arreglarlo después.


 -no tengo tiempo, ¿podemos hablar mañana?-

-si tanto insistes-


Enserio quería hablar con ella, pero si no quería hacerlo en este momento no iba a obligarla, me di media vuelta y me interne de nuevo en el bosque, comencé a correr pero esta vez fui a casa.